CMMI es un modelo importante hoy en día, para la optimización de procesos y el desarrollo de software. Las empresas que lo implementan experimentan una mayor productividad y calidad, una mejor duración del ciclo de vida y presupuestos más precisos y predecibles.
Con la tecnología avanzada y el aumento de los requisitos de los clientes, las organizaciones de software buscan reducir los costos y aumentar la productividad mediante el uso de estándares y mejores prácticas.
En el desarrollo de software siempre es importante utilizar un modelo, ya que es lo que permite conocer los elementos concretos de una empresa, rompe con las barreras de comunicación y ayuda a identificar los puntos de mejora. En este contexto, el modelo CMMI fue desarrollado para procesos relativos al desarrollo e implementación de software por la Carnegie-Mellon University y recibía el nombre de CMM.
El CMMI es un enfoque de mejora de procesos que provee a las organizaciones de los elementos esenciales para un proceso efectivo.
Algunos de los objetivos del CMMI y que son buenos para el negocio.
Gracias a este tipo de modelos, muchas empresas han mejorado sus procesos de gestión de las actividades entrelazadas de forma explícita, han aplicado prácticas de alta madurez mucho más robustas y están cumpliendo con las normas ISO de una manera mucho más completa.
Aplicando el modelo Capability Maturity Model Integration se puede calificar el grado de madurez de los distintos procesos de una empresa, y aplicando las buenas prácticas sugeridas por CMMI se pueden mejorar los mismos. Además de integrar las áreas de ingeniería de software y sistemas, el modelo también lo vincula todo con los objetivos comerciales de la organización y también mantiene un enfoque en la satisfacción de las expectativas del cliente.
Ventajas de aplicar el modelo CMMI
Muchas empresas se plantean si elegir un modelo CMMI o aplicar una metodología Agile Scrum. Se tiende a ver ambos conceptos como contrarios e incompatibles, quizás porque CMMI lleva muchos años utilizándose y la metodología Agile es más actual y ha tenido gran impacto en la gestión de procesos actual. Sin embargo, muchos expertos opinan que ambas opciones pueden ser compatibles y aplicadas en una misma organización.
CMMI ofrece un método para que las empresas puedan evaluar y mejorar sus procesos de negocio, prestando gran importancia al uso de buenas prácticas. A pesar de diferenciarse en algunos aspectos con Agile Scrum, tienen algunos puntos en común. Ambos le dan importancia a la mejora de los procesos, a la flexibilidad y persiguen los mismos objetivos.
Sea cual sea la metodología que escojas, siempre debes buscar el compromiso, la responsabilidad, la confianza, la ética y el respeto de quienes la aplican.
TDD (Test-Driven Development): es una metodología práctica de programación basada en escribir primero las pruebas, después el código fuente y, por último, refactorizar el código escrito. De esta manera, establece el camino para conseguir un código más robusto, seguro y garantizar el mantenimiento y la rapidez en el desarrollo.
DDD (Domian-Driven Design): Es ideal para el desarrollo de aplicaciones complejas y está orientada a proyectos que utilizan metodologías ágiles. Es un modelo en constante evolución y nos ayuda a tomar decisiones de diseño para enfocar y acelerar el manejo de dominios con alta complejidad durante el desarrollo de los proyectos. En definitiva, la metodología DDD te ayuda a prevenir las malas prácticas en tu sistema.
Microservicios: Son independientes, escalables y fáciles de desarrollar, y su estructura funciona como un conjunto de pequeños servicios que son ejecutados de forma autónoma. Gracias a este tipo de alternativas, las empresas están logrando aplicaciones mucho más flexibles y escalables, ya que no necesitan alterar toda la aplicación para modificar una funcionalidad.
En conclusión, aunque CMMI es el modelo más conocido para el desarrollo de software, existen diversas metodologías que aplican nuevas funcionalidades y mejoras para los negocios, como TDD, DDD o los microservicios, cada vez más utilizados. Hoy en día, todos estos modelos son importantes para mejorar los procesos y el desarrollo del software en los negocios. Las compañías que lo implementan obtienen un aumento de la calidad y la productividad.